«Hola, Cyndi. Rezo para que todo esté bien contigo». Este mensaje de Facebook de un hombre casado con el que fui a la iglesia hace años sonaba bastante inocente y podría haber venido de un buen lugar. Pero también es la forma en que comienzan los asuntos emocionales. Déjenme explicarles. Había estado enviando este tipo de mensajes cada pocos meses. Sabía que tenía que tener cuidado con la forma de responder y con la cantidad de mi ser emocional que debía invertir. Le respondí: «Me va bien. Saluda a (nombre de la esposa) de mi parte».
Una aventura emocional puede comenzar inocentemente en un entorno compartido, en persona o en línea. Cuando dos personas comienzan a compartir sus pensamientos y sentimientos, se crea una intimidad emocional. Sin topes que limiten ese potencial, puedes encontrarte en lo más profundo de lo que jamás creíste posible con otro hombre. ¿Participas en alguno de estos 7 comportamientos que podrían llevar a una aventura emocional?
Hablar de temas emocionales con otro hombre
Se siente bien que te cuiden y que te escuchen con interés. Esto es especialmente cierto cuando su marido es emocionalmente cerrado. También puede sentirse bien compartir cosas con alguien externo, que no está directamente involucrado en los problemas. Permitir que un hombre que no es tu marido entre en las cargas de tu corazón crea una vía para una intimidad emocional arriesgada. En su lugar, busque la manera de volver a conectar con su marido, confíe en una amiga íntima o hable con un consejero profesional.
Estar a solas con otro hombre
Pasar tiempo a solas con alguien del sexo opuesto crea una oportunidad para que las barreras emocionales y físicas se difuminen. Es más fácil bajar la guardia cuando no se tienen los ojos y los oídos de otras personas como responsables. Así es como empiezan los asuntos emocionales en el trabajo, donde hay motivos para que los compañeros del sexo opuesto se encuentren. Si debe tener un encuentro privado con un hombre, hágalo en un lugar público como una cafetería y tome autos separados para llegar allí.
Encontrar la autoestima en la atención de otro hombre
Hacer que un hombre haga una doble toma hacia usted puede sentirse bien. Pero si la atención de otro hombre es la única forma de sentirte bien contigo misma, corres el riesgo de tener una aventura. Tu sentido de autoestima necesita ser satisfecho por Dios, por ti misma y por tu marido. Ten cuidado con los hombres que te halagan o cuyos cumplidos te hacen sentir viva por dentro. Si ese es el caso, puede que tengas que preguntarte por qué tienes un déficit en tu sentido de la valía. Busca algunos libros de autoayuda, visita a un consejero o tómate un tiempo con las escrituras que te afirman.
Criticando mentalmente
Enfocarte en las cualidades negativas de tu marido te abrirá a compararlo con otros hombres. No tardarás en enfadarte, decepcionarte y desilusionarte con él. Sus cualidades negativas se agrandarán en tu mente hasta que ya no puedas recordar lo que es bueno de él. Pronto, usted encontrará que su mente gravita hacia los hombres que tienen las fortalezas que su marido no tiene. En lugar de eso, concéntrese en las cualidades positivas de su marido más que en las negativas.
Mantener secretos
Los secretos crean muros que impiden la intimidad. No puedes tener una verdadera intimidad con tu marido si le ocultas cosas. Ocultar los hábitos de gasto u otros comportamientos de un cónyuge hace que parezca más normal tener una relación privada con otra persona. Mantén las cosas abiertas y sinceras con tu marido. Si tienes algunos secretos que has estado guardando, busca la manera de confesárselos. Si es necesario, consulta con un consejero para que te guíe en este proceso.
No trabajes en tu conexión
No hay nada sexy en la rutina diaria de las tareas, las citas y el cuidado de los niños. A veces podemos quedar tan atrapados en la atención de las demandas inmediatas que nos olvidamos de conectar emocionalmente con nuestro cónyuge. Es importante programar un tiempo regular juntos para centrarse en el otro. Mantener esto como una práctica fiel evitará que te encuentres conectando con otro hombre.
Permitir conflictos no resueltos
Los conflictos no resueltos crean amargura. El resentimiento se acumula y acumula hasta que se pierde la intimidad emocional. Arriésgate a trabajar en el conflicto hasta que se restablezca la unidad. Perdona las ofensas pasadas que has estado guardando en tu corazón hacia tu esposo. Y si no puede resolverlas usted misma, busque la ayuda de un consejero o pastor.
Estos son sólo algunos ejemplos de cómo comienzan los asuntos emocionales. ¿Cómo te proteges a ti misma y a tu matrimonio de una aventura emocional?