Las cuentas por cobrar son el importe que un cliente debe a un vendedor. Como tal, es un activo, ya que es convertible en efectivo en una fecha futura. Las cuentas por cobrar figuran como un activo corriente en el balance, ya que suelen ser convertibles en efectivo en menos de un año.
Si el importe de las cuentas por cobrar sólo se convierte en efectivo en más de un año, se registra en cambio como un activo a largo plazo en el balance (posiblemente como un pagaré por cobrar). Dado que existe la posibilidad de que algunas cuentas por cobrar nunca se cobren, la cuenta se compensa (según el principio de devengo) con una provisión para cuentas de dudoso cobro; esta provisión contiene una estimación del importe total de las deudas incobrables relacionadas con el activo por cobrar.
Los ingresos son el importe bruto registrado por la venta de bienes o servicios. Este importe aparece en la línea superior de la cuenta de resultados.
El saldo de la cuenta de deudores se compone de todos los créditos impagados. Esto significa normalmente que el saldo de la cuenta incluye los saldos de las facturas impagadas tanto del periodo actual como del anterior. Por el contrario, el importe de los ingresos que figuran en la cuenta de resultados corresponde únicamente al período actual. Esto significa que el saldo de las cuentas por cobrar tiende a ser mayor que el monto de los ingresos reportados en cualquier período de reporte, especialmente si los términos de pago son por un período más largo que la duración del período de reporte.
En una situación en la que una empresa no permite ningún tipo de crédito a los clientes -es decir, todas las ventas se pagan por adelantado en efectivo- no hay cuentas por cobrar.
Cualquier persona que analice los resultados de un negocio debe comparar el saldo final de las cuentas por cobrar con los ingresos, y trazar esta relación en una línea de tendencia. Si el ratio disminuye con el tiempo, significa que la empresa está teniendo cada vez más dificultades para cobrar a sus clientes, lo que podría acarrear problemas financieros.
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