¿Qué es la celulitis juvenil?
La celulitis juvenil, también conocida por el nombre de «estrangulamiento de cachorros», es una afección cutánea poco común en los perros jóvenes. La celulitis juvenil suele afectar a los cachorros jóvenes, entre uno y seis meses de edad. En raras ocasiones, la celulitis juvenil también puede afectar a perros adultos jóvenes y se ha registrado en perros de hasta cuatro años de edad.
Aún no se ha identificado la causa subyacente de la celulitis juvenil. Esta condición se considera actualmente como idiopática, lo que significa que su causa es actualmente desconocida. La afección parece tener un componente inmunomediado, lo que significa que el sistema inmunitario del cachorro ataca su propia piel, pero la causa subyacente de este ataque inmunitario aún no se ha identificado.
La celulitis juvenil parece tener un posible componente hereditario. Ciertas familias de perros son más propensas a desarrollar celulitis juvenil, y los Golden Retriever están sobrerrepresentados como raza.
¿Cuáles son los signos clínicos de la celulitis juvenil?
El primer signo de la celulitis juvenil suele ser una hinchazón aguda (repentina) de la cara y el hocico. Esta hinchazón generalizada suele ir seguida de la aparición de protuberancias y pústulas (bultos o granos llenos de pus) en la cara, el hocico y las orejas. Con el tiempo, estas pústulas pueden romperse y formar costras, dando lugar a fuertes costras en las zonas afectadas.
Aunque las lesiones cutáneas asociadas a la celulitis juvenil suelen notarse primero en la cara, pueden extenderse por todo el cuerpo si la enfermedad no se trata con prontitud. Las patas, el ano y la vulva pueden verse afectados.
También puede notar la hinchazón bajo la mandíbula de su perro. En los perros con celulitis juvenil, los ganglios linfáticos submandibulares (situados a ambos lados del cuello, debajo de la mandíbula) a menudo se inflaman y se vuelven sensibles. A medida que la enfermedad progresa, estos ganglios linfáticos pueden romperse y drenar, dejando tractos supurantes y aberturas en la piel de su perro.
Típicamente, los perros afectados con celulitis juvenil no se sienten bien. Aproximadamente la mitad de los perros afectados están aletargados, con niveles de energía disminuidos. Los perros afectados suelen experimentar una pérdida de apetito. Pueden sentirse calientes al tacto, ya que los perros afectados suelen desarrollar fiebre. Con menos frecuencia, la celulitis juvenil puede provocar cojera y dolor en las articulaciones.
¿Cómo diagnosticará mi veterinario la celulitis juvenil?
«Su veterinario realizará primero una serie de pruebas para descartar otras afecciones cutáneas más comunes.»
Después de descartar estas afecciones, su veterinario realizará más pruebas para buscar causas menos comunes de inflamación de la piel. Se puede realizar una citología cutánea para examinar las células de la superficie de la piel de su perro. Esta prueba consiste en tomar una muestra de la superficie de la piel (utilizando un portaobjetos que se presiona sobre la piel o un trozo de cinta de acetato que se utiliza para recoger células/restos superficiales) para examinarla al microscopio. Además, su veterinario puede recomendar una biopsia de piel, en la que se recoge una muestra de piel de grosor completo y se envía a un laboratorio para su examen. Las impresiones de la piel y las biopsias pueden revelar un tipo específico de inflamación que puede utilizarse para identificar la celulitis juvenil.
¿Cómo se trata la celulitis juvenil?
La celulitis juvenil es una enfermedad inmunomediada. Por lo tanto, el tratamiento de la celulitis juvenil se basa en la supresión del sistema inmunitario, para detener la reacción autoinmune. El fármaco más utilizado para esta enfermedad es la prednisona, que suele administrarse durante un periodo de varias semanas y reducirse gradualmente. Los efectos secundarios de la prednisona son el aumento de la sed y la micción, así como el aumento del apetito. Pueden utilizarse otros fármacos inmunosupresores en lugar de la prednisona.
«El fármaco más utilizado para esta enfermedad es la prednisona, que suele administrarse durante un periodo de varias semanas y reducirse gradualmente.»
Los perros afectados también suelen ser tratados con antibióticos. Aunque la infección bacteriana no causa la celulitis juvenil, a menudo se desarrollan infecciones bacterianas secundarias en las lesiones cutáneas abiertas. El tratamiento de estas infecciones secundarias con antibióticos alivia parte de la inflamación asociada a esta enfermedad, aumentando el confort de su perro y facilitando el control de la respuesta inmunitaria.
¿Cuál es el pronóstico de la celulitis juvenil?
La mayoría de los casos de celulitis juvenil se resuelven completamente con un tratamiento rápido. Normalmente, un ciclo de esteroides es suficiente para resolver la afección. Si la afección reaparece cuando se reducen los esteroides, puede ser necesario un tratamiento a largo plazo, pero esto es poco frecuente.
Si se producen lesiones graves, especialmente alrededor de los ojos, pueden aparecer cicatrices permanentes. Esta cicatrización es de naturaleza cosmética y no afecta a la calidad de vida del perro.