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Nuestras emociones residen físicamente en nuestros cuerpos. En un nivel sutil, nuestros cuerpos se comunican con las energías que nos rodean y ciertos impulsos energéticos suelen relacionarse directamente con una determinada parte del cuerpo y del chakra que está debilitada o desequilibrada.
Cada chakra representa una lección de vida espiritual o un desafío para ayudarnos a obtener una comprensión más profunda de nuestro poder personal y espiritual. Esto, a su vez, nos ayuda a aprender a superar los obstáculos, a soltar los bloqueos emocionales y a recorrer el camino hacia la conciencia espiritual.
«En mi alma hay un templo, un santuario, una mezquita, una iglesia donde me arrodillo». Rabia al-Basri
Este artículo explica en profundidad el Chakra Coronario (o séptimo) explorando su conexión emocional y mental con el mundo físico.
El séptimo y más alto chakra es nuestro conector con lo divino y nuestra naturaleza espiritual. También permite que la espiritualidad se integre en nuestra vida física. El Chakra de la Corona, también conocido como Sahasrara, está directamente alineado para buscar una relación íntima con el cosmos. Es el chakra de la oración.
Sabemos que el Chakra de la Raíz actúa como un sótano o centro de reciclaje que libera al cuerpo de las energías que ya no necesita.
El Chakra de la Corona es nuestro almacén para las energías que acumulamos a través de pensamientos y acciones bondadosas y mediante actos de fe, meditación y oración. Es aquí donde podemos trascender las dimensiones de la vida y estar en comunión con «Dios».
Estas son las principales características del Chakra Coronario:
En relación con el cuerpo físico, el Chakra Coronario es el punto de entrada de la fuerza vital humana que se vierte abundantemente en el sistema energético del cuerpo desde el universo mayor (Dios o el Tao). Es esta fuerza la que nutre el cuerpo, la mente y el espíritu, y distribuye esta energía por todo el cuerpo físico y por los chakras inferiores.
Es por ello que activar la energía Kundalini y los Sushumna, Ida y Pingala (los principales nadis o canales de energía del cuerpo) es de vital importancia. No sólo fomenta que la energía de la base se eleve, sino que también permite que la energía del Chakra Coronario fluya libremente por el cuerpo y hacia los chakras inferiores.
El Chakra Coronario es la conexión
El séptimo chakra influye en los principales sistemas del cuerpo: el nervioso central, el muscular y el de la piel. Por lo tanto, los problemas de la piel como las erupciones, el acné o el eczema podrían significar que tu Chakra Coronario está en desarmonía.
A nivel emocional, el Chakra Coronario genera devoción, pensamiento inspirador y profético, conexiones místicas e ideas trascendentales. ¿Ha tenido sueños increíbles últimamente? Podría ser tu Chakra Coronario comunicándose contigo.
El Chakra Coronario es Energía Vital
Simbólicamente, el Sahasrara contiene la forma más pura de prana (o energía vital) y gira en torno al reino del misticismo. Por lo tanto, las personas con un Sahasrara bloqueado son de mente estrecha e incapaces de ver el panorama general, carecen de motivación y culpan a los demás de su crisis o estancamiento. También tienen una percepción sesgada de la vida, la muerte y la espiritualidad.
El Chakra de la Corona nos recuerda que en muchos momentos de nuestra vida nos enfrentamos a una encrucijada en la que tenemos que dejar «morir» una fase antigua para poder renacer de nuevo.
El Chakra de la Corona es la humanidad
Este es el chakra de la humanidad. Aquí nos damos cuenta de que estamos todos juntos en esto y todas nuestras almas están aquí para aprender lo que se siente al estar en el cuerpo humano. Aquellos que no pueden conectar con los demás o tener una mente abierta suelen sufrir problemas relacionados con la empatía a escala mundial, son solitarios y, la mayoría de las veces, muy críticos con las creencias y la espiritualidad.
Lo que nos enseña el Chakra Coronario
La energía del Sahasrara nos motiva a buscar una conexión más profunda con lo divino en todo lo que hacemos. Por eso se oye hablar de artistas, yoguis e inventores que explican que tuvieron una experiencia trascendental que les conmovió durante su práctica; o quizás de individuos que experimentaron una dichosa epifanía que les hizo comprender una gran idea.
La gente no debe confundir la conexión espiritual personal del séptimo chakra con la religión. La religión está arraigada en el seguimiento de grupos, lo que sugiere que en los números estamos seguros. La espiritualidad es una experiencia individual dirigida a liberar los miedos del mundo físico y relacionarse con lo divino y saber que lo divino está en todos nosotros.
El Poder del Chakra Coronario
Cuantas más personas puedan conectar con el poder de este chakra, más cambiará nuestra conciencia colectiva a escala masiva hacia una comprensión más holística de la salud, la enfermedad, el medio ambiente, la biodiversidad y la humanidad en su conjunto.
Nuestra meta en este plano terrenal es trascender toda ilusión y descubrir el poder innato del espíritu. Nos damos cuenta de que somos responsables de lo que creamos y, a su vez, necesitamos aprender a actuar, pensar y hablar con amor y sabiduría durante toda la vida.
Recuerda que todos los obstáculos físicos y emocionales son sólo ilusiones de las que hay que aprender. Busca siempre el significado de cualquier situación, síguelo y luego suéltalo una vez que ya no sea relevante.
Cómo sanar tu chakra de la corona:
Cierra los ojos y sabe que tú eres el universo y el universo eres tú. Toda la sabiduría infinita de lo divino fluye a través de ti y en ti.
Asanas de yoga para el Chakra de la Corona: Parada de Cabeza, Postura de la Grulla, Parada de Hombros
Cristales para equilibrar el Chakra de la Corona: Celestita, Zafiro Azul y Cuarzo Claro
Aromaterapia para el Chakra de la Corona: Ylang Ylang, Palo de Rosa y Loto del Lirio de Agua
Somos nuestra propia iglesia, templo, sinagoga o mezquita, y todo lo que necesitamos es cerrar los ojos, respirar y sentir la energía de lo divino a nuestro alrededor y corriendo por nuestros chakras. Es el origen de nuestro poder y es la energía que alimenta nuestra biología.
Una vez que nos damos cuenta de la materia de la que estamos hechos, no tenemos otra opción que llevar una vida espiritual.
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