Florida ha bruñido aún más su reputación de fauna exótica, y mortal, con el descubrimiento de tres cocodrilos del Nilo cerca de Miami – a unas 6.000 millas de donde los enormes depredadores se encuentran normalmente.
El análisis del ADN ha confirmado que tres animales capturados en el sur de Florida entre 2009 y 2014 son verdaderos cocodrilos del Nilo. Estos reptiles pueden llegar a medir hasta 6 metros de largo, pesan tanto como un coche pequeño y tienen fama de ser feroces devoradores de hombres, ya que se calcula que 200 personas al año mueren en las fauces de un cocodrilo del Nilo.
Los cocodrilos, que normalmente se encuentran en los pantanos, ciénagas y ríos del África subsahariana, no son muy exigentes en cuanto a sus opciones gastronómicas, comiendo cebras, puercoespines, pequeños hipopótamos y otros cocodrilos que se cruzan en su camino.
Uno de los cautivos de Florida fue capturado mientras se relajaba en el porche de una casa en Miami, los otros simplemente estaban retozando en los Everglades.
«Las probabilidades de que los pocos que estudiamos los reptiles de Florida hayamos encontrado todos los cocodrilos del Nilo que hay por ahí son probablemente improbables», dijo Kenneth Krysko, herpetólogo de la Universidad de Florida que dirigió el análisis de ADN, publicado en el Journal of Herpetological Conservation and Biology.
«Sabemos que pueden sobrevivir en la naturaleza de Florida durante numerosos años, sabemos que crecen rápidamente aquí y conocemos su comportamiento en su área de distribución nativa, y no hay ninguna razón para sugerir que eso cambiaría aquí en Florida».
Krysko y sus colegas descubrieron que los cocodrilos estaban emparentados entre sí, pero no con otros cocodrilos del Nilo mantenidos en el Animal Kingdom de Disney u otras atracciones de Florida. Esto significa que los cocodrilos fueron probablemente liberados por un comerciante de vida silvestre sin licencia, o se escaparon del zoológico privado de alguien.
Hay poca evidencia hasta ahora de un ejército más amplio de cocodrilos del Nilo en Florida. Sin embargo, el descubrimiento plantea la posibilidad de otra especie introducida perjudicial en el estado, que ya está lidiando con una afluencia de pitones birmanas y cerdos asilvestrados a zonas que incluyen los Everglades.
«Mi esperanza como biólogo es que la introducción de los cocodrilos del Nilo en Florida abra los ojos de todos al problema de las especies invasoras que tenemos aquí en nuestro estado», dijo Krysko. «Ahora aquí hay otro, pero esta vez no es sólo un pequeño gecko doméstico de África».
Los cocodrilos del Nilo son una de las especies de cocodrilos más grandes y feroces del mundo, sólo superados por los gigantescos cocodrilos de agua salada que se encuentran en Australia. Su presencia en Florida podría tener implicaciones desafortunadas para los cocodrilos y caimanes americanos.
En 2005, un cocodrilo del Nilo llamado Osama fue capturado tras un ataque que se cobró la vida de 83 personas en el sur de Uganda. Osama, que arrastraba a las personas desde las orillas del lago Victoria o desde las embarcaciones hasta su guarida, fue capturado después de que se dejara un tentador par de pulmones de vaca como cebo dentro de un cepo de cobre. Osama fue vendida para su cría y transferida a una dieta de pollos.
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