Dolor de talón

Revisado médicamente por Drugs.com. Last updated on Jan 22, 2021.

  • Guía de salud

¿Qué es el dolor de talón?

Harvard Health Publishing

El dolor de talón es un síntoma común que tiene muchas causas posibles. Aunque a veces el dolor de talón está causado por una enfermedad sistémica (que afecta a todo el cuerpo), como la artritis reumatoide o la gota, suele ser una afección local que afecta sólo al pie. Las causas locales más comunes del dolor de talón incluyen:

  • Fascitis plantar – La fascitis plantar es una inflamación dolorosa de la fascia plantar, una banda fibrosa de tejido en la planta del pie que ayuda a sostener el arco. La fascitis plantar se produce cuando la fascia plantar se sobrecarga o se estira en exceso. Esto provoca pequeños desgarros en las fibras de la fascia, especialmente donde ésta se une al hueso del talón. La fascitis plantar puede desarrollarse en casi cualquier persona, pero es especialmente común en los siguientes grupos de personas: personas con diabetes, personas obesas, mujeres embarazadas, corredores, jugadores de voleibol, jugadores de tenis y personas que participan en ejercicios aeróbicos con escalones o que suben escaleras. También se puede desencadenar la fascitis plantar por empujar un aparato o mueble grande o por llevar un calzado desgastado o mal construido. En los deportistas, la fascitis plantar puede producirse tras un periodo de entrenamiento intenso, especialmente en los corredores que se esfuerzan por correr distancias más largas. Las personas con pies planos tienen un mayor riesgo de desarrollar fascitis plantar.
  • Espolón calcáneo: un espolón calcáneo es un crecimiento anormal del hueso en la zona donde la fascia plantar se une al hueso del talón. Está causado por una tensión prolongada en la fascia plantar y los músculos del pie, especialmente en personas obesas, corredores o corredoras. Al igual que en la fascitis plantar, los zapatos desgastados, mal ajustados o mal construidos pueden agravar el problema. Los espolones del talón pueden no ser la causa del dolor de talón aunque se vean en una radiografía. De hecho, pueden desarrollarse como una reacción a la fascitis plantar y también pueden encontrarse en personas sin dolor o problemas en el talón.
    • Dolor en el talón

      • Apofisitis calcánea: en esta afección, el centro del hueso del talón se irrita como resultado de un zapato nuevo o de un aumento de la actividad deportiva. Este dolor se produce en la parte posterior del talón, no en la parte inferior. La apofisitis calcánea es una causa bastante común de dolor de talón en niños activos y en crecimiento de entre 8 y 14 años. Aunque casi cualquier niño o niña puede verse afectado, los niños que participan en deportes que requieren muchos saltos tienen el mayor riesgo de desarrollar esta afección.
      • Bursitis: la bursitis significa la inflamación de una bursa, una bolsa que recubre muchas articulaciones y permite que los tendones y los músculos se muevan con facilidad cuando la articulación está en movimiento. En el talón, la bursitis puede causar dolor en la parte inferior o posterior del talón. En algunos casos, la bursitis del talón está relacionada con problemas estructurales del pie que provocan una marcha anormal (forma de caminar). En otros casos, el uso de zapatos con tacones poco acolchados puede desencadenar la bursitis.
      • Golpe de bomba – Esta afección, conocida médicamente como exostosis calcánea posterior, es un crecimiento óseo anormal en la parte posterior del talón. Es especialmente frecuente en mujeres jóvenes, en las que suele estar relacionada con una bursitis de larga duración causada por la presión de los zapatos de tacón.
        • Magulladuras locales – Al igual que otras partes del pie, el talón puede sufrir golpes y magulladuras de forma accidental. Normalmente, esto ocurre como un «hematoma de piedra», una lesión por impacto causada al pisar un objeto afilado mientras se camina descalzo.
        • Tendinitis de Aquiles – En la mayoría de los casos, la tendinitis de Aquiles (inflamación del tendón de Aquiles) se desencadena por el uso excesivo, especialmente por los saltos excesivos durante los deportes. Sin embargo, también puede estar relacionada con un calzado mal ajustado si la parte superior trasera de un zapato se clava en el tendón de Aquiles en la parte posterior del talón. Con menos frecuencia, está causada por una enfermedad inflamatoria, como la espondilitis anquilosante (también llamada espondiloartritis axial), la artritis reactiva, la gota o la artritis reumatoide.
        • Nervio atrapado: la compresión de un pequeño nervio (una rama del nervio plantar lateral) puede causar dolor, entumecimiento u hormigueo en la zona del talón. En muchos casos, esta compresión del nervio está relacionada con un esguince, una fractura o una vena varicosa (hinchada) cerca del talón.

        Síntomas

        El talón puede doler de muchas maneras diferentes, dependiendo de la causa:

        • Fascitis plantar: la fascitis plantar suele causar un intenso dolor en el talón a lo largo de la planta del pie durante los primeros pasos después de levantarse de la cama por la mañana. Este dolor en el talón suele desaparecer una vez que se empieza a caminar, pero puede volver a aparecer a última hora de la tarde o por la noche.
        • Espolón calcáneo – Aunque las pruebas radiográficas sugieren que alrededor del 10% de la población general tiene espolones en el talón, muchas de estas personas no presentan ningún síntoma. En otros, los espolones del talón parecen causar dolor y sensibilidad en la parte inferior del talón que empeoran a lo largo de varios meses.
        • Apofisitis calcánea – En un niño, esta afección causa dolor y sensibilidad en la parte inferior trasera del talón. El talón afectado suele doler al tacto, pero no está evidentemente hinchado.
        • Bursitis – La bursitis que afecta al talón causa dolor en el centro de la superficie inferior del talón que empeora al estar de pie durante mucho tiempo y dolor en la parte posterior del talón que empeora si se dobla el pie hacia arriba o hacia abajo.
        • Golpe de bomba – Esta afección causa un agrandamiento doloroso en la parte posterior del talón, especialmente cuando se usan zapatos que presionan la parte posterior del talón.
        • Moretones locales: los moretones en el talón, al igual que los moretones en otras partes del cuerpo, pueden causar dolor, una leve hinchazón, dolor y una decoloración negra y azul de la piel.
        • Tendinitis de Aquiles: esta afección causa dolor en la parte posterior del talón, donde el tendón de Aquiles se une al talón. El dolor suele empeorar si se hace ejercicio o se practica algún deporte, y suele ir seguido de dolor, rigidez e hinchazón leve.
        • Nervio atrapado: un nervio atrapado puede causar dolor, entumecimiento u hormigueo en casi cualquier parte de la parte posterior, interior o inferior del talón. Además, suele haber otros síntomas -como hinchazón o decoloración- si el nervio atrapado fue causado por un esguince, una fractura u otra lesión.

        Diagnóstico

        Después de que hayas descrito los síntomas de tu pie, tu médico querrá saber más detalles sobre tu dolor, tu historial médico y tu estilo de vida, incluyendo:

        • Si su dolor empeora en momentos específicos del día o después de actividades específicas
        • Cualquier lesión reciente en la zona
        • Su historial médico y ortopédico, especialmente cualquier historial de diabetes, artritis o lesiones en el pie o la pierna
        • Su edad y ocupación
        • Sus actividades recreativas, incluidos los deportes y los programas de ejercicio
        • El tipo de calzado que suele usar, lo bien que le queda y la frecuencia con la que compra un par nuevo
        • Su médico le examinará, incluyendo:

          • Una evaluación de su marcha – Mientras está descalzo, su médico le pedirá que se quede quieto y que camine para evaluar cómo se mueve su pie al caminar.
          • Un examen de sus pies – Su médico puede comparar sus pies para detectar cualquier diferencia entre ellos. A continuación, el médico puede examinar el pie dolorido para detectar signos de sensibilidad, hinchazón, decoloración, debilidad muscular y disminución de la amplitud de movimiento.
          • Un examen neurológico – Los nervios y los músculos pueden ser evaluados comprobando la fuerza, la sensibilidad y los reflejos.
          • Además de examinarlo a usted, su profesional de la salud puede querer examinar su calzado. Los signos de desgaste excesivo en ciertas partes de un zapato pueden proporcionar pistas valiosas sobre problemas en la forma de caminar y una mala alineación de los huesos. Dependiendo de los resultados de su examen físico, es posible que necesite radiografías del pie u otras pruebas de diagnóstico.

            Duración prevista

            La duración del dolor de talón depende de la causa. Por ejemplo, el dolor de talón que está relacionado con la obesidad debería mejorar gradualmente a medida que se pierde peso.

            Si su dolor de talón está relacionado con un deporte o régimen de ejercicio específico, un período de descanso puede traer alivio. Una vez que su talón esté libre de dolor, es posible que tenga que modificar su programa de entrenamiento para evitar que el dolor vuelva a aparecer. La mayoría de los dolores de talón desaparecen en poco tiempo, ya sea por sí solos o después de un tratamiento.

            Prevención

            Puede ayudar a prevenir el dolor de talón manteniendo un peso saludable, calentando antes de hacer deporte y utilizando un calzado que sujete el arco del pie y amortigüe el talón. Si es propenso a la fascitis plantar, los ejercicios que estiran el tendón de Aquiles (cordón del talón) y la fascia plantar pueden ayudar a evitar que la zona se vuelva a lesionar. También puede masajear las plantas de los pies con hielo después de actividades deportivas estresantes. A veces, las únicas intervenciones necesarias son un breve período de descanso y un nuevo calzado para caminar o correr.

            Tratamiento

            El tratamiento del dolor de talón depende de su causa:

            • Fascitis plantar – La mayoría de los médicos recomiendan un programa de seis a ocho semanas de tratamiento conservador, que incluye reposo temporal de los deportes que desencadenan el problema del pie, ejercicios de estiramiento, masaje con hielo en la planta del pie, modificaciones en el calzado, encintado de la planta del pie lesionado y paracetamol (Tylenol) o antiinflamatorios no esteroideos (AINE), como aspirina o ibuprofeno (Advil, Motrin y otros) para el dolor. Si este tratamiento conservador no ayuda, el médico puede recomendar que lleve una férula nocturna o una escayola corta en la pierna, o puede inyectar medicamentos corticosteroides en la zona dolorida. La cirugía rara vez es necesaria y no siempre tiene éxito.
            • Espolón calcáneo: el tratamiento conservador incluye el uso de soportes para el calzado (ya sea una elevación del talón o una almohadilla para el talón en forma de donut) y un número limitado de inyecciones locales de corticosteroides (normalmente hasta tres al año). Al igual que en la fascitis plantar, la cirugía es el último recurso.
            • Apofisitis calcánea: esta afección suele desaparecer por sí sola. Mientras tanto, el tratamiento conservador incluye el reposo y el uso de taloneras y almohadillas para el talón.
            • Bursitis – El tratamiento es similar al de los espolones del talón. Puede ser esencial cambiar el tipo de calzado.
            • Balanceo – El tratamiento es similar al de la bursitis y los espolones del talón. En casos raros, puede ser necesario extirpar quirúrgicamente el crecimiento óseo del talón.
            • Magulladuras locales – Las magulladuras del talón pueden tratarse aplicando una compresa de hielo durante los primeros minutos después de la lesión.
            • Tendinitis del tendón de Aquiles – Esta afección se trata de forma conservadora con reposo, AINE y fisioterapia.
            • Nervio atrapado – Si un esguince, una fractura u otra lesión ha causado el nervio atrapado, este problema subyacente debe tratarse primero. En casos raros, se puede realizar una cirugía para liberar el nervio atrapado.

            Cuándo llamar a un profesional

            Pida cita para ver a un profesional de la salud si tiene un dolor de talón importante que no mejora en pocos días.

            Pronóstico

            Aunque el pronóstico depende de la causa específica del dolor de talón, la mayoría de las personas responden a una terapia conservadora y no quirúrgica. Por ejemplo, al menos el 90% de las personas con fascitis plantar se curan en un plazo de 6 a 8 semanas de terapia conservadora, o de terapia conservadora seguida de 6 a 8 semanas de férulas nocturnas. Menos del 5% de las personas con fascitis plantar requieren cirugía.

            El dolor de talón puede regresar si se vuelve demasiado pronto a su nivel anterior de ejercicio o participación deportiva.

            Recursos externos

            Instituto Nacional de Artritis y Enfermedades Musculoesqueléticas y de la Piel
            http://www.niams.nih.gov/

            Sociedad Americana de Orthopaedic Foot and Ankle Society
            http://www.aofas.org/

            Asociación Médica Americana de Podología (APMA)
            http://www.apma.org/

            Academia Americana de Medicina Deportiva Podológica
            http://www.aapsm.org/

            Colegio Americano de Cirujanos de Pie y Tobillo
            http://www.acfas.org/

            Colegio Americano de Ortopedia del Pie & Ortopedia del Tobillo & Medicina
            http://www.acfaom.org/

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