Un buen sándwich Reuben es un asunto desordenado y kilométrico compuesto por carne en conserva salada, chucrut picante, queso suizo derretido y un chorrito de aderezo ruso presionado entre dos rebanadas de pan de centeno. Podría decirse que es una de las grandes invenciones culinarias del siglo XX, una combinación improbable que ha sido un gran éxito durante casi 100 años. Pero, ¿quién es el misterioso cerebro Reuben, bueno, detrás de la historia del origen del querido sándwich Reuben? Naturalmente, la respuesta está lejos de ser simple, ya que hay más de una persona a la que se le atribuye haber traído este sándwich a las masas.
Delicias de Nueva York vs. Hotel de Omaha
Como un elemento básico moderno de las charcuterías judías de Nueva York, parece natural que sea allí donde se originó el sándwich Reuben. Muchos afirman que Arnold Reuben, propietario del Reuben’s Restaurant and Deli en la calle E. 58, lo inventó en 1914. Según cuenta su hija, una actriz llamada Annette Seelos (conocida por sus papeles protagonistas en las películas de Charlie Chaplin) entró en el restaurante una noche a última hora y estaba hambrienta. Le pidió a Reuben que le preparara un sándwich enorme, así que él tomó jamón, pavo, suizo, ensalada de col y aderezo ruso y lo sirvió en pan de centeno. Fue un éxito, y lo llamó el Reuben Special.
Los lectores observadores notarán, sin embargo, que hay algunas diferencias clave entre ese sándwich y el Reuben que conocemos y amamos hoy.
Lo que nos lleva a Omaha, Nebraska, donde otros juran que el sándwich Reuben fue inventado por primera vez en la década de 1920. Fue allí donde Bernard Schimmel dirigía la cocina del Hotel Blackstone, del que su padre era propietario y donde también disfrutaba de una partida de póker semanal con sus amigos. Según cuenta la leyenda, uno de los jugadores -el propietario de una tienda de comestibles local, Reuben Kulafofsky- pidió un sándwich con carne en conserva y chucrut. Schimmel, que era un cocinero de formación europea, le dio su propio giro escurriendo el chucrut, mezclándolo con el aderezo Thousand Island, y luego poniéndole capas de suizo y carne en conserva casera en pan de centeno oscuro. La primera referencia a un sándwich Reuben en el menú de un restaurante parece ser del comedor principal del Blackstone en 1934, cuando el sándwich costaba sólo 40 centavos. Esto parece zanjar el debate, al menos hasta cierto punto.
Una receta ganadora
Una cosa es segura: el sándwich Reuben se ganó la fama nacional después de ganar el Concurso Nacional de Ideas para Sándwiches (sí, eso era realmente una cosa) en 1956 después de que fuera presentado por un chef en uno de los otros hoteles propiedad del padre de Schimmel. Para entonces ya lo había incorporado a todos los menús. Los jueces lo calificaron de «sándwich de tamaño humano» y lo declararon «el mejor sándwich de hotel y restaurante del país» de entre unos 600 presentados. A partir de ahí, su popularidad se disparó, y hoy en día, está disponible de costa a costa – y ciertamente en Omaha, NE.