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Por suerte, no hizo falta que nadie le dijera al actor que debía cambiar de carrera. A los 24 años, cuando le faltaba un año para cumplir el plazo que él mismo se había fijado, la prueba de que había dejado huella era evidente para todos. Sus papeles en Grease y Fiebre del sábado noche le habían catapultado al estrellato, mientras la revista Time le comparaba con Robert De Niro y Al Pacino.
John Joseph Travolta llegó al mundo el 18 de febrero de 1954, siendo el menor de los seis hijos de Salvatore Travolta, un italoamericano de segunda generación, y Helen Cecilia Burke, una actriz y cantante irlandesa-americana. Creció en Nueva Jersey, donde su padre, un ex jugador de fútbol americano semiprofesional, tenía un taller de reparación de neumáticos.
Cuando era adolescente tenía la intención de trabajar en un aeropuerto como mozo de equipajes o vendedor de billetes, pero decidió seguir a su madre en el mundo de la interpretación. A los 16 años, se trasladó a Nueva York para perseguir su sueño.
A los 18 años, John había hecho una gira por Estados Unidos como miembro del reparto de Grease, había actuado en Broadway y había aparecido en varias series de televisión. Su papel en la serie de televisión de los años setenta Welcome Back Kotter le convirtió en un galán adolescente estadounidense.
Su primer papel importante en el cine fue en la película de Steven King Carrie. Pero fue su papel como el narcisista Tony Manero, rey de la discoteca con traje blanco, en la película de 1978 Fiebre del sábado noche, para la que se sometió a un exhaustivo entrenamiento de baile durante meses, el que captó la atención del público de todo el mundo. Un año más tarde, su estatus como uno de los protagonistas más atractivos de Hollywood se confirmó cuando hizo vibrar los corazones femeninos como el rompecorazones vestido de cuero Danny Zuko en la versión cinematográfica de Grease. Muchos consideraron que se le había encasillado como un icono de la música disco de los setenta, y vieron que su atractivo disminuía. Fue durante esta época cuando se hizo seguidor del movimiento de la Cienciología, algo que, según el actor, le ayudó a sobrellevar los tiempos difíciles.
La suerte de John cambió, sin embargo, cuando Quentin Tarrantino le invitó a interpretar al matón Vinnie Vega en su película de 1997 Pulp Fiction, en sustitución de Michael Madson, que había abandonado para hacer Wyatt Earp. Su actuación en el clásico de culto recibió críticas muy favorables y le valió una segunda nominación al Oscar. Por consejo de Tarantino, aceptó un papel en Get Shorty, que en 1996 le valió un Globo de Oro. A éste le siguieron varios papeles notables, como el de un agente del FBI que asume la identidad de su agente en Face/Off, el de jefe de una operación de hackers en Swordfish y el de madre protectora Edna Turnblad en Hairspray, de 2007.
Una vez fue uno de los solteros más codiciados de Hollywood, John salió con Brooke Shields y Catherine Deneuve, e incluso bailó con la difunta princesa Diana en una cena en la Casa Blanca, un momento al que desde entonces ha atribuido el relanzamiento de su carrera. Sin embargo, en 1991 sentó la cabeza y se casó con la actriz Kelly Preston, dos años después de haber rodado juntos Los expertos. Su hijo Jett llegó en abril de 1992, y su hija Ella Bleu hizo su entrada un año más tarde.
El éxito financiero le dio la oportunidad de satisfacer su pasión infantil por los aviones y, con el paso de los años, aumentó su flota de aparatos de última generación. A los 26 años obtuvo el título de piloto y pasó a pilotar un Boeing 747, un avión de pasajeros cuatrimotor de 189 plazas.
En enero de 2009, la tragedia se cebó con la muerte de su querido hijo Jett. El joven de 16 años, que padecía autismo, falleció tras sufrir un ataque mientras la familia estaba de vacaciones en las Bahamas.
«Tenemos el corazón roto porque nuestro tiempo con él fue tan breve. Apreciaremos el tiempo que tuvimos con él por el resto de nuestras vidas», se lee en un comunicado emitido por la desconsolada pareja. «Jett era el hijo más maravilloso que dos padres podrían pedir, e iluminaba las vidas de todos los que se encontraban con él».
La afligida familia se encontró entonces en el centro de un intento de extorsión, después de que un paramédico que trató a Jett poco antes de su muerte amenazara supuestamente con divulgar información privada a menos que la estrella de Grease pagara 25 millones de dólares. El caso llegó a los tribunales, pero los Travolta acabaron retirando los cargos.
«La familia Travolta ha dicho que este asunto les ha causado un estrés y un dolor increíbles y que desean dejar todo esto atrás», dijo su abogado.
En mayo de 2010, hubo alegría para John y Kelly, que anunciaron que estaban esperando un hijo. «Es imposible guardar un secreto… especialmente uno tan maravilloso como éste», anunciaron, según dijo un amigo: «Este bebé es tan sanador».
John Travolta – Biografía
Englewood, Nueva Jersey