La historia detrás de la ‘Ruleta Rusa’, el infame juego MORTAL
Wulich nos invitó a sentarnos en un cartel. le obedeció en silencio . Me pareció leer el sello de la muerte en su pálido rostro. Me di cuenta de que a menudo en el rostro de una persona que se supone que va a morir en pocas horas hay alguna extraña huella de un destino inevitable.
«¡Vas a morir hoy!». Le dije.
Se volvió rápidamente hacia mí, pero me contestó lenta y tranquilamente:
«Puede que sí, puede que no…». Luego, volviéndose hacia el mayor, preguntó: «¿Está cargada la pistola?» El mayor, confundido, no recordaba bien.
Este pasaje de la novela clásica «El héroe de nuestro tiempo», del gran autor ruso Mijaíl Lermontov, describe una apuesta entre dos oficiales del ejército del zar que sólo tenían que descubrir si el destino estaba predeterminado o regido por las personas.
A falta de pruebas empíricas suficientes, las partes recurrieron a una pistola y a la suerte, realizando un experimento muy similar a lo que se conoce como ‘Ruleta Rusa’, un misterioso «juego» mortal envuelto en el misterio.
Aunque, a día de hoy, la gente sigue muriendo a consecuencia de este juego, poco se sabe de sus orígenes, así como de lo extendido que está realmente.
Diversión de oficiales
Lo que sí se sabe a ciencia cierta de la ‘ruleta rusa’ es lo popular que es como referencia para guionistas y productores de todo el mundo. Se han creado innumerables tramas en torno a este peculiar tema.
Una teoría popular dice que el no tan famoso autor estadounidense de relatos de aventuras Georges Arthur Surdez acuñó por primera vez el término ‘ruleta rusa’ cuando publicó un relato corto del mismo título en la revista Collier’s en 1937.
La historia de ficción la cuenta un soldado francés, que tuvo la oportunidad de presenciar cómo los oficiales rusos -los que tenían poco que perder tras la revolución bolchevique de 1917- solían jugar a la ‘ruleta rusa’ en cualquier lugar: «En una mesa, en un café, con los amigos».
Extrañamente, ningún escritor ruso que trabajara antes de la Revolución Bolchevique de 1917 menciona la ‘ruleta rusa’ en su prosa de ficción o en sus biografías. Incluso el mencionado pasaje de Mijaíl Lermontov describe una situación en la que se utilizaba una pistola de un solo tiro en lugar de un revólver (la cuestión allí era simplemente si estaba cargado o vacío).
El revólver más extendido en el Imperio Ruso en la época de la revolución era el revólver ‘Nagant’ M1895 de siete tiros. Dado que el personaje del escritor Surdez describe en su relato un revólver de seis tiros, muchos cuestionan la relación del relato con la realidad. Bien podría haber sido un relato de ficción creado al antojo de la imaginación del autor.