Oferta agregada
La oferta agregada (OA) se define como la cantidad total de bienes y servicios (producción real) producidos y suministrados por las empresas de una economía durante un período de tiempo. Incluye el suministro de una serie de tipos de bienes y servicios, entre los que se incluyen los bienes de consumo privado, los bienes de capital, los bienes públicos y de mérito y los bienes destinados a los mercados de ultramar.
Componentes de la oferta agregada
Bienes de consumo
Los bienes y servicios de consumo privado, como los vehículos de motor, los ordenadores, la ropa y el ocio, son suministrados por el sector privado y consumidos por los hogares. Para una economía desarrollada, éste es el mayor componente de la oferta agregada.
Bienes de capital
Los bienes de capital, como la maquinaria, el equipo y las instalaciones, se suministran a otras empresas. Estos bienes de inversión son importantes porque su uso añade capacidad y aumenta la capacidad de la economía para suministrar bienes de consumo privados en el futuro.
Bienes públicos y de mérito
Los bienes y servicios producidos por empresas privadas para su uso por parte de la administración central o local, como la educación y la sanidad, son también un componente importante de la oferta agregada. Muchas empresas privadas, como las del sector de la construcción, las tecnologías de la información y los productos farmacéuticos, dependen de contratos para suministrar al sector público.
Bienes comercializados
Los bienes y servicios destinados a la exportación, como los productos químicos, el ocio y los servicios financieros, son también un componente clave de la oferta agregada.
La curva de la oferta agregada
La simple ley de la oferta sugiere que las empresas, en general, planificarán la producción de más productos a niveles de precios más altos.
La curva básica de AS
A niveles de precios más altos en toda la economía, las empresas esperan poder vender sus productos finales a precios más altos, y habrá una relación positiva entre el nivel de precios y la oferta agregada.
Se supone que cualquier aumento en los precios de los insumos (costes) que pueda producirse irá por detrás de los aumentos en el nivel general de precios. Por ello, las empresas esperan beneficiarse -al menos a corto plazo- de una subida del nivel de precios. Basándonos en esto, podemos derivar un simple programa de oferta de AS, como se muestra a continuación:
Bn de libras esterlinas | P8 | 650 |
P7 | 600 |
P6 | 5 |
P5 | 500 |
450 | |
P3 | 400 | P2 | 350 | P1 | 300 | P | 250 |
La pendiente de la curva AS
Las diferentes teorías sobre la forma de la curva AS surgen de diferentes explicaciones sobre cómo responde el producto real a los cambios en la demanda agregada. Existen, esencialmente, tres visiones diferentes:
La visión clásica
La visión clásica del producto real era que éste se encontraba fijo en un nivel determinado. En este nivel, todos los factores de producción de la economía estarían plenamente empleados. (Digamos a la producción 500).
Nivel de precios | Como £Bn | P8 | 500 |
P7 | 500 | P6 | 500 | 500 | P4 | 500 | P3 | 500 |
P2 | 500 |
P1 | 500 |
P | 500 |
Los cambios en la AD sólo provocarán cambios en el nivel de precios, no el nivel de producción real.
La visión keynesiana
La curva keynesiana de EA supone que los precios y los salarios son fijos hasta que se alcanza el pleno empleo. En el «rango keynesiano» hay capacidad sobrante en la economía, el nivel de precios es estable, y la producción real puede expandirse como resultado de los aumentos de la EA sin ninguna presión inflacionaria.
Más allá del pleno empleo, cualquier cambio en la EA traerá consigo niveles de precios más altos. La visión keynesiana de la EA se adaptó para mostrar un «rango intermedio» en el que tanto el desempleo como la inflación podrían darse juntos.
Nivel de precios | AS £Bn | ||||||||||||
P8 | 500 | ||||||||||||
P7 | 500 | ||||||||||||
P6 | 500 | P5 | 300 | ||||||||||
P4 | 200 | ||||||||||||
P3 | 0 | ||||||||||||
P2 | 0 | ||||||||||||
P1 | 0 | P | 0 |
La curva de AS keynesiana adaptada es más realista, y pone de manifiesto las compensaciones que pueden darse entre el nivel de precios y el desempleo.
La visión «moderna» de corto y largo plazo
Para resolver el problema de la curva AS keynesiana y clásica, los economistas modernos tienden a separar la curva AS de corto plazo (SRAS) de la curva AS de largo plazo (LRAS). Se supone que el corto plazo comienza inmediatamente después de un aumento del nivel de precios (por ejemplo, como resultado de un aumento de la AD), y termina cuando los precios de los insumos (costes de producción) han aumentado. Por lo tanto, durante el corto plazo los productores están experimentando un aumento en sus precios «reales» y producen más producción – y la curva de oferta se inclina hacia arriba.
Se supone que cualquier aumento en los precios de los insumos (costos) que pueda seguir se retrasa detrás de los aumentos en el nivel general de precios. En este análisis, se separan el SRAS y el LRAS. Esto permite a los economistas ser más flexibles en su análisis de una economía moderna. Esto se puede ver en el siguiente ejemplo:
Nivel de precios | SRAS £bn | LRAS £bn | |||
P8 | 650 | 500 | |||
P7 | P7 | 600 | 500 | ||
P6 | 550 | 500 | |||
P5 | 500 | 500 | P4 | 450 | 500 | P3 | 400 | 500 |
P2 | 350 | 500 | |||
P1 | 300 | 500 | P | 250 | 500 |
Desplazamientos del SRAS
La causa más probable de un desplazamiento de la curva del SRAS es acomodar los cambios en la curva AD de corto plazo.
Otros desplazamientos de la curva SRAS están referidos a un shock de oferta, como subidas inesperadas del precio del petróleo o tras pérdidas de cosechas, como se ilustra a continuación:
Desplazamientos de la LRAS
La curva de oferta agregada a largo plazo (LRAS) es el nivel de producción real a largo plazo que es sostenible dada la cantidad y calidad actual de los recursos escasos de la economía. La producción real a largo plazo no está determinada por el nivel de precios, y la curva de oferta agregada a largo plazo será vertical: los cambios a corto plazo en el nivel de precios no alteran la producción a largo plazo de una economía. Esto equivale a estar en el borde de la frontera de posibilidades de producción de un país.
La curva de oferta agregada de largo plazo (LRAS) se muestra como una curva vertical, en pleno empleo. La LRAS puede desplazarse si la productividad de la economía cambia, ya sea por un aumento de la cantidad de recursos escasos, como la inmigración o el crecimiento orgánico de la población, o por mejoras en la calidad de los recursos, como la mejora de la educación y la formación.
Los desplazamientos de la LRAS suelen ser graduales y anticipados, a diferencia de los desplazamientos de la SRAS, que pueden ser drásticos e imprevistos. Los LRAS pueden cambiar por muchas razones, entre ellas:
- El nivel de gasto en nueva tecnología, que permite a una economía producir en mayor volumen o mejorar la calidad – incluso utilizando la misma cantidad de recursos escasos.
- La inversión interna a largo plazo procedente del extranjero, que permite aumentar la producción. La inversión interna, al igual que la inversión nacional, aumenta la capacidad productiva de una economía.
- La emigración y el crecimiento de la población, que aumentan la cantidad de capital humano.
- La educación y la formación, que aumentan la calidad del capital humano.
- La competencia en los mercados de productos y de trabajo, que mejora la eficiencia y la productividad.
- Una política de oferta eficaz, que crea el entorno adecuado para que los hogares suministren factores de producción y las empresas produzcan.
Los efectos de un aumento de la inversión de capital
El impacto inicial de la inversión se produce en la curva AD, que se desplaza hacia la derecha ya que la inversión (I) es un componente de la AD, como se muestra a continuación:
A largo plazo, la inversión aumentará la capacidad de producción de la economía, lo que desplaza la curva LRAS hacia la derecha. Por último, es probable que los costes de producción disminuyan a medida que la nueva tecnología aumente la eficiencia y reduzca los costes medios. Esto significa que la curva SRAS se desplaza hacia la derecha. Los efectos combinados son que la economía crece, tanto en términos de producción potencial como de producción real, sin presiones inflacionistas.
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