Las paletas, los polos, los polos de hielo, como quiera que se llame a esta deliciosa golosina helada, es una gran cosa que alguien haya tenido la brillante inspiración de crearla. Pero, ¿quién fue el inventor del polo?
La invención de los polos fue un «accidente». El mérito es de Frank Epperson, que entonces sólo tenía 11 años, por lo que ocurrió en una fría noche de San Francisco en 1905. Mezcló un poco de agua y soda azucarada en polvo con un pequeño agitador de madera en un vaso antes de alejarse y olvidarse de la bebida, que acabó quedándose fuera toda la noche.
A la mañana siguiente, cuando salió, lo que le esperaba era el primer polo de la historia, que estaba congelado dentro del vaso. Pudo sacar el helado del vaso con el agitador después de utilizar agua caliente para desprender el helado del vaso. Lo lamió del agitador, decidió que era bastante sabroso y lo llamó Epsicle para incorporar su apellido.
Comenzó a venderlos en el barrio. Fue 18 años más tarde cuando solicitó la patente de su «hielo congelado en un palo», descrito además como una atractiva confección congelada que podía consumirse cómodamente y sin contaminación porque no necesitaba cuchara, tenedor, plato ni ningún otro implemento. En ese momento era un hombre adulto con hijos, y éstos insistieron en rebautizarlos como POPsicles. Comenzó a venderlos en un parque de atracciones de California.
Epperson cayó en desgracia a finales de la década de 1920, tuvo que liquidar sus activos y se vio obligado a vender los derechos de su creación a la empresa neoyorquina Joe Lowe en 1929. Lowe llevó la paleta a la fama y al éxito nacional. Añadieron un segundo palito, con el que se crearon dos polos pegados, y lo vendieron por cinco céntimos. Se rumorea que se vendieron cerca de 8.000 en Coney Island en un solo día caluroso de verano.
Las demandas surgieron cuando Good Humor consideró que se trataba de una infracción de sus derechos de autor para el helado y el chocolate que también se vendía en un palo. Finalmente, un tribunal decidió que la compañía Lowe sí tenía derecho a vender golosinas congeladas hechas de AGUA mientras que Good Humor podía seguir vendiendo sus paletas hechas de CREMA DE HIELO.
La disputa continuó hasta 1989, cuando Unilever compró Popsicle y luego Good Humor, que unió las dos marcas. Se calcula que Unilever sigue vendiendo dos mil millones de Popsicles al año en muchos sabores, siendo el más popular el de cereza. Los palos dobles se eliminaron en 1986 porque eran más difíciles de comer y demasiado sucios.
Puedes hacer tus propios polos
Puedes comprar moldes de diferentes formas o simplemente utilizar un vaso de plástico o papel y un palo de madera. Añade agua o zumo o limonada o agua de coco o un líquido similar más miel, azúcar o un edulcorante. Mezcla en un procesador de alimentos o en una batidora. Utiliza un bol o un vaso medidor grande con boquilla para facilitar la introducción de la mezcla en el molde o vaso. Añade un palo de madera. Necesita unas 2 1/2 tazas de puré para hacer ocho paletas, y tarda entre ocho horas y una noche en congelarse por completo. Deja aproximadamente 1/4″ de espacio en la parte superior para la expansión. Desmolda la paleta pasando el fondo del molde por agua caliente durante unos dos minutos. Tire del palito de la paleta suavemente para retirarlo. Si sigue siendo difícil de quitar, vuelva a pasar el molde bajo el agua brevemente.
Algunas de las variaciones interesantes son estas:
* Se puede añadir cualquier tipo de fruta madura y jugosa cortada o bayas o zumo de frutas, o probar muchas combinaciones. Cuando los ingredientes se congelan, se pierde algo de sabor, por lo que el puré tiene que tener un fuerte sabor a fruta y estar en el lado dulce antes de la congelación.
* Es sencillo hacer paletas sólo con zumo de naranja fresco.
* Para las paletas a base de crema, utilice una base como el yogur, la nata espesa, la leche de coco o la leche de almendras.
Agregue bayas frescas, fruta, cacao en polvo o café frío y mezcle. Añade una cucharada de almidón de maíz para que queden cremosos y no helados.
* Para una ocasión especial, puedes añadir flores comestibles para hacerlos más atractivos y únicos.
¿Qué hizo Frank Epperson el resto de su vida?
No hemos podido averiguarlo, pero como vivió hasta la avanzada edad de 89 años, ¡quizá animó a generaciones de su familia y sus amigos a seguir disfrutando de los polos!