El término médico para un «útero inclinado» es «antevertido» (se inclina hacia delante) o «útero retrovertido» (se inclina hacia atrás). Rara vez, o nunca, es una causa de infertilidad.
El útero consta de dos partes, la parte inferior del cuello uterino, y la parte superior del cuerpo (fondo) del útero. El cuello uterino mide unos 5 centímetros de largo, mientras que el cuerpo se asienta sobre el cuello uterino y tiene el tamaño de una pera. El fondo uterino puede ser algo más grande en las mujeres que tuvieron un bebé, y puede ser más pequeño en las mujeres que no tuvieron un bebé y en las mujeres en la menopausia.
Ninguna de las dos posiciones, por sí misma, interfiere en su capacidad para quedarse embarazada.
Tanto el cuello uterino como el cuerpo del útero están unidos a las paredes laterales de la pelvis por varios ligamentos. Estos ligamentos son flexibles y permiten que el útero se incline ligeramente hacia delante o hacia atrás. Las mujeres que han tenido partos vaginales tienen ligamentos más flexibles que las mujeres que nunca han tenido un bebé.
Es normal tener un útero ligeramente inclinado hacia delante («útero antevertido»), que se flexiona hacia la vejiga, y aproximadamente 1 de cada 4-5 mujeres tiene un útero hacia atrás («útero retrovertido»), inclinado hacia su columna vertebral. Ninguna de las dos posiciones interfiere por sí misma en su capacidad para quedarse embarazada.
A veces hay una razón para un útero retrovertido. La endometriosis, el revestimiento endometrial situado fuera del útero o la enfermedad inflamatoria pélvica pueden causar a veces un útero retrovertido. El tejido cicatricial puede interferir con el movimiento normal del útero y las trompas de Falopio, disminuyendo la posibilidad de quedarse embarazada al impedir que el óvulo llegue al esperma
Si tiene el útero muy inclinado, insertar un espéculo e intentar mirar el cuello uterino puede resultar algo incómodo.
Un útero retrovertido puede resultar ocasionalmente incómodo durante las relaciones sexuales. Dado que el pene suele estar en estrecho contacto con la parte superior de la vagina, podría golpear contra un útero retrovertido, y posiblemente hacer que uno o ambos compañeros sexuales se sientan incómodos. Cambiar de posición y permitir que el útero se mueva suele mejorar las molestias.
Si está intentando concebir y le dicen que tiene el «útero inclinado» debe preguntar a su médico si hay una causa específica como cicatrices o endometriosis que puedan interferir en su fertilidad.
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