Una de las preguntas con las que nos tropezamos en nuestras conversaciones e investigaciones es su incertidumbre sobre el impacto que tiene el ejercicio en la piscina en nuestro cuerpo. Entre esas una de las más comunes es la pregunta ¿es la natación un ejercicio de cardio o de fuerza?
Para entender eso debemos empezar por entender cuáles son las características de esos dos tipos de actividad, y cómo los definimos y reconocemos.
¿Qué es la actividad cardiovascular?
Lo que hacen los ejercicios aeróbicos es acondicionar el interior de tu cuerpo: el corazón y los pulmones, por ejemplo. Otra característica es que los ejercicios aeróbicos son continuos y para que sean más efectivos requieren que tu pulso alcance un cierto nivel por encima de tu frecuencia cardíaca en reposo y que se mantenga así durante al menos unos minutos.
Gracias a que la natación es principalmente una actividad cardiovascular, se puede realizar todos los días ya que tu músculo cardíaco se puede ejercitar incluso múltiples veces cada día (¡es el único músculo de tu cuerpo que tiene la resistencia que permite un trabajo continuo!).
La natación construye tus músculos menos que otras actividades similares ya que el agua limita lo que tu músculo puede mover, pero es genial para las personas que quieren un cuerpo sano y tonificado en lugar de muy musculoso por razones estéticas. También permite ejercitar todo el cuerpo, incluyendo la espalda, los brazos y las piernas… ¡y todo al mismo tiempo!
¿Qué es la actividad de fuerza?
El entrenamiento de fuerza requiere trabajar contra una resistencia moderada. Esta resistencia puede ser proporcionada por las pesas o por tu cuerpo» Las flexiones y las sentadillas son ejemplos de cuando la resistencia es proporcionada por tu propio cuerpo.
Lo que los ejercicios de entrenamiento de fuerza son perfectos es el acondicionamiento de los «exteriores» de tu cuerpo como los brazos y las piernas.
En contraste con la natación – este tipo de ejercicios es el tipo de actividad de parada y arranque que requiere ráfagas cortas de esfuerzo con período de descanso/parada realizado en serie.
¿Cómo aprovechar al máximo el ejercicio aeróbico en la piscina?
Ahora que sabemos que la natación es sobre todo un ejercicio cardiovascular vamos a descubrir cómo maximizar los beneficios que obtienes de cada sesión de entrenamiento!
Como hemos visto lo que se requiere para un entrenamiento de natación efectivo es que tu pulso se mantenga en un determinado pasillo llamado zona de frecuencia cardíaca. Cada zona tiene sus beneficios y puedes aprender mucho más sobre ello aquí.
¡La forma más fácil y emocionante de mantenerse en la zona elegida es utilizar algo como el reloj de entrenamiento Swimmo que te avisará mediante vibraciones cuando nades demasiado lento o demasiado rápido y mantendrá la intensidad del entrenamiento de natación según lo previsto!
Para saber más visita el resto de nuestra página y vuelve pronto para otro post sobre natación.
