No es ninguna sorpresa que Aubrey O’Day haya cambiado mucho a lo largo de los años. Sólo tenía 21 años cuando saltó a la palestra en 2005 como miembro del nuevo grupo de chicas de Diddy, Danity Kane. Pero 12 años después, a sus 33 años, Aubrey no sólo parece haber crecido, sino que parece una persona casi completamente nueva.
Probablemente, gran parte de ello se deba a su forma de vestir y maquillarse, pero si te fijas bien, parece que podría tratarse de cirugía plástica. Aubrey ha negado haberse sometido al bisturí a lo largo de los años: en 2011, habló con Celebuzz y dijo: «Mi maquillaje -lo mucho o lo poco que me pongo- afecta constantemente a la forma en que la gente me ve en lo que respecta a que todo el mundo piense que me he sometido a una cirugía plástica».
Sin embargo, sí que admitió haberse visto bastante diferente a lo largo de los años.
«A veces miro las fotos y pienso que quizá no me parezco a mí misma ahí», dijo en la misma entrevista. «Mis ojos se ven diferentes o mis labios se ven muy grandes… Podría haber sido un plumero de labios, o un mal maquillador, demasiado maquillaje, demasiado poco maquillaje; lo que sea.»
Pero Aubrey no sería la primera celebridad que niega haberse sometido al bisturí (o a la aguja) y luego ‘confiesa’ años después. Al fin y al cabo, Kylie Jenner también solía negar que se había puesto rellenos en los labios. (Y apostamos a que Kylie admitirá aún más con el paso de los años).
Pero aunque esa entrevista fuera cierta en su momento, en los seis años transcurridos desde entonces, Aubrey ha tenido muchas oportunidades de darle un repaso a su aspecto. Y no es ningún secreto que ha luchado con la imagen corporal.
«Todo el mundo, en algún momento y hasta cierto punto, quiere ser apreciado y aceptado por los demás», admitió a Celebuzz. «Es un proceso continuo. No creo que haya nunca una solución rápida para quererse completamente a uno mismo en ninguna fase»
Para Aubrey, parece que querer su cuerpo podría haber significado cambiarlo. Y no la culpamos, pero sí nos gustaría que fuera sincera. Oye, si tienes el dinero, ve a por él, y si tienes el cuerpo, presúmelo. Pero todos sabemos de dónde viene ese cuerpo.
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