Riesgos potenciales del vodka
Incluso el consumo moderado de alcohol no está exento de riesgos. No deberías beber en absoluto si lo estás:
- Embarazada o intentando concebir
- Conducción
- Menor de la edad legal para beber
- Deprimida
- Incapaz de controlar la cantidad que bebe
- Trastornos por consumo de alcohol
- Presión arterial alta, enfermedades cardíacas o accidentes cerebrovasculares
- Depresión y ansiedad
- Problemas digestivos
- Ciertos tipos de cáncer
- Demencia
- Sistema inmunitario débil
Pérdida del embarazo o trastornos del parto
El alcohol consumido durante el embarazo pasa al bebé a través del cordón umbilical, lo que aumenta el riesgo de aborto espontáneo o de nacimiento de un bebé muerto. Además, el consumo de alcohol durante el embarazo puede provocar trastornos del síndrome alcohólico fetal (FASD). Los niños con TEAF muestran una serie de síntomas físicos, conductuales y cognitivos.
Interacciones con medicamentos
Algunos medicamentos tienen interacciones negativas con el alcohol. El alcohol puede hacer que ciertos medicamentos sean ineficaces o tóxicos. La combinación también puede causar náuseas, somnolencia o falta de coordinación. Incluso puede ponerle en riesgo de sufrir problemas respiratorios, hemorragias internas o problemas cardíacos.
Preste atención a las etiquetas de los medicamentos y a las instrucciones dadas por su médico o farmacéutico. Si le preocupa la posible interacción de un medicamento con el alcohol, no tenga miedo de preguntar.
Cáncer de mama
Incluso el consumo moderado de alcohol aumenta el riesgo de todos los cánceres relacionados con el alcohol, incluyendo el de cavidad oral, faringe, laringe, colorrectal, mama femenina, hígado y esófago, pero especialmente el de mama. Gran parte del peligro parece deberse a la correspondiente falta de ácido fólico, pero los suplementos de folato pueden ayudar a mitigar el aumento del riesgo.
Trastornos del sueño
Aunque el consumo moderado de alcohol tiene inicialmente un efecto sedante, el consumo elevado de alcohol puede interferir con el sueño sostenido y profundo, contribuyendo a la somnolencia diurna y a otros problemas relacionados con el sueño.
Aumento de peso
Además de estar lleno de calorías vacías, el alcohol puede llevar a comer en exceso. El alcohol no sólo disminuye las inhibiciones que de otro modo podrían ayudarle a regular el deseo de comer en exceso, sino que parece estimular partes del cerebro que evocan el hambre. Sin embargo, se necesitan más pruebas en humanos para verificar esta relación.
Beber en exceso
El consumo moderado de alcohol puede convertirse en consumo excesivo. A corto plazo, el consumo excesivo de alcohol puede conducir a un comportamiento de riesgo o a una intoxicación etílica. Los riesgos a largo plazo incluyen:
.